Tal y como te contábamos en su día, el ‘crumble’ tiene un origen humilde. En él no faltan ingredientes como la harina, el azúcar, la mantequilla y alguna fruta, dando lugar a un postre delicioso que tiene como característica principal ese aspecto ‘desmigajado’ o 'desmenuzado' (traducción literal del vocablo inglés ‘crumble’).
En aquella ocasión te ofrecíamos la receta para prepararlo con las cerezas como fruta principal. Hoy las cambiamos por manzanas y frambuesas para enseñarte a preparar este rico ‘crumble’ que ves en la imagen.
En aquella ocasión te ofrecíamos la receta para prepararlo con las cerezas como fruta principal. Hoy las cambiamos por manzanas y frambuesas para enseñarte a preparar este rico ‘crumble’ que ves en la imagen.
Un postre que tendrás listo en sólo cuatro pasos. Toma nota primero de los ingredientes necesarios: 2 manzanas; 500 gramos de frambuesas (u otros frutos del bosque); 160 gramos de harina; 100 gramos de azúcar moreno; 30 gramos de almendra molida; 2 c.c. de canela molida; 50 ml de aceite de oliva o 50 gramos de mantequilla blanda o una mezcla de ambos.
PREPARACIÓN:
- Pelar las manzanas, cortarlas en rodajas finas y ponerlas en el fondo de un molde redondo.
- Lavar las frambuesas y colocarlas encima de las manzanas. Precalentar el horno a 180ºC.
- En un bol grande, echar la harina, el azúcar, la almendra, la canela y el aceite o la mantequilla derretida. Mezclar con la punta de los dedos, para crear grumos, como arena; no tiene por qué quedar una masa homogénea.
- Repartir proporcionalmente la mezcla de harina, azúcar, aceite (o mantequilla), almendra y canela sobre la fruta. Hornear 30-40 minutos a 180ºC.
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